Descerebrado significa no concentrado

Si nuestra consciencia no está recogida, entonces no podemos desarrollar simétricamente nuestro cuerpo, ya que la energía se va a distribuir desigualmente. El recogimiento de la consciencia se determina o por su detención completa, o por la generación del esfuerzo de adhesión. De hecho, por muy ofensivo que parezca para los que estén desarrollando su cerebro, según los indicadores energéticos, para el cuerpo el estado de no-pensar es equivalente al estado de pensar. Es decir, “descerebrado” es alguien que no ha aprendido a pensar normalmente o a quien los pensamientos le distraen de la posición de irreflexión.

Ambas condiciones son peligrosas, puesto que, ante todo, crean un desarrollo muscular asimétrico, que a su vez afecta a toda la simetría de la persona. Un ser humano asimétrico nunca podrá conocer las leyes de la mediana y nunca logrará vivencias de un orden más alto (de lo que se encarga la simetría).

En un cuerpo asimétrico los aminoácidos levógiros no pueden realizar la medida de la rotación, de lo que proviene el desarrollo incorrecto del cuerpo. Pero el ADN dextrógiro también está limitado por la naturaleza temporal. Es decir, en estas condiciones, el potencial dotado por naturaleza es incapaz de cambiarse, sólo puede empeorarse.

Por supuesto, la asimetría no es una cosa unívocamente negativa. Incluso la necesitamos para la apertura de la simetría. Pero la asimetría es buena sólo después de tener conocida la simetría. El conocimiento de la simetría depende, por completo, del Arte de desarrollo del cerebro.

Es importante comprender que viviendo en un espacio tridimensional, somos dependientes de tres niveles de la simetría o la asimetría. En este caso, nuestro cuerpo tiene tres niveles de disposición de esta simetría. Y podemos tener la simetría perfecta sólo en la cabeza, la que luego se puede transmitir a todo el cuerpo. Es decir, la simetría del cerebro es la condición de una interacción entre las partes del cerebro y los sistemas que contiene (frente, sienes, barbilla, nuca, subcortical). Pero el desarrollo de la simetría debe seguir el camino de la carga mental, psicológica, morfológica, bioquímica y biofísica.

Aquí también hay que añadir tres niveles más: prenatal (obtenido por nacimiento), postnatal (adquirido durante la vida) y temporal-espacial (el hábitat), que tenemos antes de empezar a trabajar con el cerebro (si no, el desarrollo puede aumentar la condición y no desarrollar precisamente el cerebro). El desarrollo del cerebro debe correlacionarse con el aumento de la sensibilidad y el gusto, es decir, lo que nos permitirá profundizarnos a través de las energías dependientes, importadas (respiración, alimentación y movimiento).

Al no profundizarnos en los indicadores sensitivos, sólo vamos a aumentar la intervención o del hemisferio izquierdo o del hemisferio derecho del cerebro, en el trabajo corporal. Por ejemplo, el hemisferio izquierdo va a sobredesarrollar el lado derecho del cuerpo respecto al izquierdo. Al profundizarnos o dicho de otra manera, al enfocarnos en los sentimientos, empezaremos a coordinar nuestro cerebro. Por ejemplo, el oído, como un siguiente paso en la adquisición de la simetría, nos permite ajustar las relaciones en los lóbulos cerebrales de las sienes, que, en general, en la mayoría de la gente, son asimétricos. Luego viene el momento de seguir la habla para evitar el exceso de desarrollo del hemisferio izquierdo. El habla incontrolada y no enfocada aumenta la circulación de la energía en la parte derecha del cuerpo.

Pero hay que entender que hoy en día, todo esto ya nos ha llevado a una asimetría morfológica, es decir, nacemos con claras violaciones de la simetría. Además, esta violación naturalmente genera también las correspondientes condiciones bioquímicas de existencia, dando al hombre ciertos sentimientos y vivencias, basados en las leyes de la asimetría y no de la simetría.

Las vivencias asimétricas hoy en día, están llenando todo el espacio del ser humano. Ellas siguen ganando fuerza y de hecho, casi paralizan las condiciones de un desarrollo simétrico, ya que el porcentaje de los que tienen un cerebro simétrico, es sólo el 1-2%. La bioquímica de la existencia asimétrica, mata al humano en el ser humano, lo que es el mayor peligro para nosotros. En esta situación, uno comienza a depender de las falsas vivencias o de la naturaleza asimétrica, impropia del desarrollo de las vivencias.

Por lo tanto, si el cuerpo y el cerebro son asimétricos, entonces el cuerpo no puede ser considerado como una Unidad, pero aun así, los procesos energéticos de alguna manera deben alimentar el cerebro. Esto se realiza a través del aumento de la actividad de las hormonas sexuales, activando la adrenalina, que se convierte en un ambiente nutritivo natural del cerebro que está en un cuerpo asimétrico. Como resultado el hombre empieza a depender de los estados agresivos, del estrés y de la agitación ruda. Y es muy lógico que se active una retro-comunicación, cuando el hemisferio derecho comienza a exigir del cuerpo más y más excitación.

Todo esto lleva a la creación de un sistema asimétrico de percepción, donde lo más peligroso es la falta de experiencia de desarrollo. El cerebro asimétrico no puede tener tal experiencia por definición, ya que él sirve sólo a los procesos de reacción en el cuerpo. Esto significa que una persona asimétrica no puede tener individualidad, ya que su cerebro sólo asesora a los procesos en el cuerpo, pero no los cultiva.

El cerebro es inconstante, él depende todo el tiempo de la excitación por la comida, de la excitación sexual, de la excitación relacionada con la respiración incorrecta... De hecho, todos estos procesos en el cuerpo que, incluso de haber sido simétricos y correctos, al final, resulta que han sido llevados por el cerebro, a otro sistema de coordenadas. Imagínense, por ejemplo, lo difícil que resulta, para los pulmones, funcionar sincrónicamente, si la energía de la respiración en un cuerpo asimétrico no puede ser usada en su totalidad. O la difícil que es la “vida” de los riñones, por el hecho de que el cuerpo no está sincronizado y la energía sólo se quema y no se retorna. Esto, al mismo tiempo, lleva a un “desgaste” del riñón derecho o izquierdo (más a menudo, el derecho).

 

Preguntas y Respuestas

¿Cuál es la naturaleza de la agitación?

La naturaleza de la agitación se determina por el funcionamiento de los vasos del cuerpo, los vasos-centros, es decir, los lugares donde la energía puede conectarse y resonar. A veces, el hombre no tiene la suficiente energía para la excitación y se excita a través de un impacto externo.


Es curioso, ¿hay alguien que haya estudiado la simetría de la gente que vive en tribus, lejos de la civilización, en algún lugar de la selva amazónica? ¿Hasta qué grados ellos son simétricos o asimétricos? Esto arrojaría luz sobre ¿cómo tales factores como el hábitat, la sociedad y los cambios planetarios ejercen alguna influencia en la simetría de una persona? Y aún más interesante es, ¿qué diferencia hay entre el grado de simetría de la gente antigua y la gente de hoy?

La simetría se determina por las siguientes condiciones:

  • La calidad del útero
  • La frecuencia del espacio (si permite la sincronización del cerebro o no)
  • La alimentación (que daña o no el funcionamiento de los órganos)
  • El ritmo de la vida (que molesta o no la respiración)

Tengan esto de referencia.


¿Cuál es el diapasón de frecuencia del funcionamiento cerebral del chamán que está en un trance?

Bueno, el trance puede ser determinado diferentemente, según las personas diferentes. Pero, en general, una persona, aun teniendo la mente muy desarrollada no puede mantener constantemente los 20-30 Hz. Es decir, resulta que después de los 20 Hz, mucha gente entra en un estado de trance. Pero, en realidad, cuanto menos desarrollado está el cerebro, tantas más oportunidades de “caer” en un trance tiene la persona. Así, por ejemplo, los psíquicos “caen” a los 5 Hz de resonancia.

 

09 noviembre 2011

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